Compré este increíble dispositivo para un viaje a Hawái, ahora se lo estoy enviando a mi hijo para la universidad

Para una madre, vacaciones significa deber de vigilar:

Observar a los niños correr hacia la montaña rusa más cercana... mientras tú cuidas el cochecito.

Observar a tu esposo animar y correr de un lado a otro en la línea de banda... mientras tú cuidas los teléfonos y las carteras desde las gradas.

Observar a la familia hacer bombas en la piscina... mientras tú cuidas las llaves del coche desde una tumbona.

Pero cuando compré los boletos para Hawái para celebrar la graduación de mi hija mayor en la escuela secundaria, tomé una decisión: En este viaje, no estaría vigilando.

Compré FlexSafe, el cofre portátil y discreto para guardar nuestros objetos de valor familiares para que yo pudiera hacer lo que debería estar haciendo en vacaciones.

Planeaba disfrutar de un mai tai al lado de la piscina, completamente tranquila sabiendo que todos los teléfonos, carteras y llaves estaban guardados.

Y, spoiler alerta — esta mamá se divirtió en sus vacaciones. Tanto, que cuando regresé a casa, compré un segundo FlexSafe para mi hija.

Me enteré de FlexSafe a través de una amiga. Mientras estaba de vacaciones, ella dejó su bolso de playa escondido debajo de una toalla al lado de su silla de jardín. (Admito — he hecho esto muchas, MUCHAS veces antes.)

Cuando se volteó para broncear su espalda, se quedó dormida. Y un ladrón se acercó, vio que estaba dormida y le arrebató el bolso — con TODO adentro.

Cuando ella regresó a casa, investigó en línea y encontró un cofre portátil que no podía ser robado por cualquier ladrón al acecho. Cuando me lo contó, grité: “¡Eso suena perfecto para nuestro viaje a Hawái!”

Compré FlexSafe para nuestro viaje a Hawái y me gustó tanto que inmediatamente compré uno para mi hija.

FlexSafe se sujeta a cualquier superficie resistente — incluyendo una pata de mesa de picnic, un cochecito, una bicicleta o incluso una silla de jardín. Simplemente coloca todos tus objetos de valor dentro, mezcla los tres dígitos del código y tus objetos de valor estarán seguros y guardados.

Hawái fue la primera vez que me sentí en paz en unas vacaciones desde que nació mi primer hijo.

Pasé 18 años metiendo llaves y teléfonos en mi sujetador deportivo o debajo de una toalla de playa mientras intentaba disfrutar.

Sabía que no era lo más responsable que podía hacer, pero hey — ¡esas también eran mis vacaciones!

Pero con FlexSafe, realmente pude disfrutar de Hawái. Tomé cócteles, me zambullí en la piscina e incluso fui a hacer parapente en la playa.

En cuanto regresamos y mi hija comenzó a empacar para la universidad, le compré un FlexSafe para llevar con ella.

FlexSafe es increíblemente fácil de usar. Solo coloca tu teléfono, reloj, cartera, joyas u otros objetos de valor dentro del bolsillo. Ciérralo con cremallera. Asegúralo a cualquier superficie estable — desde tu bicicleta hasta tu silla de jardín — y relájate.

O, si eres como yo, ve a buscar una margarita para disfrutar junto a la piscina.

Si eres padre — como yo — probablemente tengas las siguientes preguntas rondando por tu mente preocupada:

• ¿No puede alguien simplemente arrebatártelo? ¡No! A diferencia de un bolso, FlexSafe se sujeta a otro objeto (como una silla de jardín). Un ladrón tendría que robar toda la silla de jardín para escapar con tus pertenencias (lo cual no sería precisamente un plan de escapada discreto).

• ¿Se puede abrir rompiéndolo? ¡No! Créeme, lo intenté. Mucho. La construcción de cinco capas de tejido es ultra resistente a cortes y está diseñada para durar. ¡Nadie va a cortar esto!

• ¿Se puede romper el candado y abrirlo? De nuevo, ¡no! El candado de aleación de níquel es resistente a la corrosión y muy resistente. Además, si está enganchado a algo (como un cochecito), tendrías que levantar todo el cochecito por encima de tu cabeza para intentar romperlo.

Confíe en FlexSafe para proteger nuestros objetos de valor familiares durante las vacaciones, y con toda razón. Por lo tanto, confié en él para proteger a mi niña mientras se iba a la universidad.

Compré FlexSafe para Hawái porque quería divertirme, pero ser responsable.

Esa es la definición de la experiencia universitaria que quiero para mi hija.

Quiero que esté segura. Pero sé que ella estará yendo a fiestas, eventos deportivos y viviendo en dormitorios.

No soy ingenua — yo también fui a la universidad y viví en el campus. Estoy familiarizada con vomitar en las duchas, dormitorios desbloqueados, alarmas de incendio a las 3 a.m. y compañeros de clase borrachos entrando a todas horas.

Esto es lo que hizo diferente mi experiencia universitaria: no tenía un iPhone, tarjetas de crédito ni un automóvil cuando fui a la universidad. Mi hija tiene los tres.

Para mantener esos objetos seguros y guardados mientras ella duerme, está en clase o en alguna actividad escolar, quiero que use FlexSafe.

Con materiales de bloqueo RFID incorporados, sus dispositivos electrónicos están protegidos de los ciberdelincuentes. Nadie le robará los datos de su tarjeta de crédito o teléfono.

Y si un estudiante universitario un poco intoxicado por casualidad hace sonar la alarma de incendio y activa el sistema de rociadores, FlexSafe puede proteger su teléfono del agua.

La duradera tela de nylon de calidad de equipaje no solo mantiene seguras sus tarjetas de crédito y dispositivos electrónicos, sino también secos.

Si enviara a mi hija a la escuela con una caja fuerte grande y metálica y la obligara a usarla, nunca regresaría a casa durante las vacaciones.

Afortunadamente, FlexSafe es la caja fuerte discreta que no parece una caja fuerte. Ella puede esconderla en el cajón de calcetines, debajo del futón o en el armario. O también puede sujetarla fácilmente a su bicicleta, con la que se desplaza de ida y vuelta a clase.

Lo mejor de todo es que FlexSafe viene con una garantía de devolución del dinero de 30 días. Así que, si un mes después de empezar las clases me llama y me dice: 'Mamá, simplemente no estoy usando esto', puedo devolverlo y obtener un reembolso completo. (O tal vez solo me lo quede yo.)

Con mi hija yendo a su primer año de universidad, sé que ya no puedo estar 'vigilándola'. Lo único que puedo hacer es proporcionarle las herramientas que necesita para mantenerse segura.

Creo que todos los padres deberían comprar un FlexSafe para sus hijos. Los estudiantes universitarios tienen mucho más objetos de valor y electrónicos que nuestra generación.

Y francamente, después de lo que acabamos de gastar en la matrícula del primer semestre de mi hija, ¡no podemos permitirnos reemplazar un iPhone robado! A solo $59.99, comprar un FlexSafe es mucho más rentable que reemplazar cualquiera de sus electrónicos.

Es fácil ver por qué 40,000 personas confían en FlexSafe para proteger sus pertenencias. No importa dónde te encuentres en el mundo, ya sea en una playa en Hawái, en un partido de fútbol infantil o en un campus universitario, FlexSafe ayuda a mantener seguras tus pertenencias (y a tu familia).